"Ese cinturón tiene que ser nuestro"

El próximo 11 de octubre, en el Evolution Boxing de Elche, la boxeadora gijonesa Minerva Gutiérrez afrontará uno de los mayores retos de su carrera: la disputa del vacante Campeonato de España profesional del peso supermosca, una cita que la puede convertir en historia viva del boxeo asturiano. La oportunidad llega tras un giro inesperado en el camino, pero la púgil está lista para dejarlo todo sobre el ring.

Inicialmente, Minerva iba a enfrentarse a la canaria Davinia Pérez el pasado 19 de julio en una esperada pelea por el título nacional. Sin embargo, un accidente obligó a cancelar el combate. Lejos de centrarse en su propia decepción, Minerva mostró empatía y madurez:

“Fue un palo, ya que tenía muchas ganas de medirme con alguien de su categoría, pero estas cosas pasan en el boxeo. Siendo por un accidente, son momentos de pensar más en la otra persona que en uno mismo”.

Nuevo nombre, mismo objetivo

Tras la baja de Davinia, la siguiente en el ranking, la ilicitana Maite Botella, recogió el testigo para disputar el título. “Maite era la siguiente en optar al título y se le dio la oportunidad. Aunque tiene menos experiencia en boxeo profesional —lleva cuatro peleas— es una chica rodada en deportes de contacto. Será una pelea interesante”.

La apodada como ‘La Muñequita’, varias veces monarca nacional de Muay Thai y campeona de España de boxeo amateur en 2022, se enfrenta al mayor reto de su carrera: boxear ante su gente con un título profesional nacional en juego y frente a una rival muy exigente. Ambas presentan una estatura similar: 1,57 m para Botella y 1,56 m para Gutiérrez.

“Tiene que ser nuestro”

A pesar del cambio de rival, Minerva mantuvo intacta su preparación. La confianza en su equipo y en el trabajo realizado es total: “No cambiamos nada. Si para la otra estaba bien, para esta estoy el doble de mejor. Hemos empalmado dos preparaciones. El trabajo físico con Jorge en Asturiding y el técnico con Rober en nuestro club, Bravos Mirmidones, me da un resultado brutal. Siempre con miras a mejorar, pero sin techo”.

Gutiérrez es consciente de lo que está en juego: “Tengo los nervios normales de un campeonato de España. Estaríamos hablando de pasar a la historia de Asturias, y para mí eso es algo muy importante”. Con determinación y pasión, la boxeadora de Gijón lanza una declaración de intenciones clara para el día del combate: “Pienso dejarme hasta el último suspiro para que ese cinturón sea mío… y de todos los que me apoyan. Tiene que ser nuestro”.